Desde que en Howard Gardner desarrolló la teoría de las inteligencias múltiples, esta concepción pluralista repercutió en una mejora significativa de la acción educativa. En base a este modelo, se considera fundamental atender a los ritmos y estilos de aprendizaje propios de cada alumno, respetando sus necesidades, centros de interés y talentos.
En el marco de esta atención individualizada, proponemos integrar al entorno escolar la Inteligencia Emocional de forma explícita y formal, como parte fundamental del desarrollo integral del individuo. En una sociedad en continuo cambio debemos ayudar a nuestros alumnos a adaptarse, facilitándoles las herramientas necesarias para su percepción, comprensión, asimilación y expresión de emociones.
Si usted también está interesado en promover el desarrollo emocional de sus alumnos, en el siguiente link encontrará el dossier del proyecto propuesto.
¡¡NO SE OLVIDEN DE SER FELICES!!
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